lunes, 26 de noviembre de 2012
Tipos de "ME GUSTA" en facebook
martes, 14 de agosto de 2012
La Deuda
Luego de estar varias horas frente al televisor comiéndome la canción de piñón fijo, y saberme completamente la coreografía: "manos arriba,puños cerrados..." decidí salir a la calle a conseguir el dinero que desesperadamente necesitaba.
Así que, aunque tenia mi dedo índice amputado del día que, accidentalmente, quise violar a una mujer,quien me lo rajo de un pedo, salí con mi mono tao muí, traído especialmente de pakistan totalmente empastillado, para utilizarlo como acompañante en mis actos.
El día era esplendido, el mono estaba drogado, un poco menos que yo, pero feliz, un poco mas que yo.
Llegamos a una calle muy transitada en la zona de Palermo.La calle estaba llena de mujeres. Creo que eran mujeres por sus ropajes, aunque sus voces lograban confundirme bastante. Eran un tanto amables y constantemente ofrecían que nos hospedemos en un hotel 24hs con ellas. No logre entender el objetivo de eso.
De cualquier manera quise seguir con mi plan de conseguir dinero con el mono y la canción de piñón fijo,
así que encendí el camión que había dejado estacionado un buen hombre, quien se ve que estaba ayudando a estas pobres muchachas a entrar en calor, y advertí que tendría que ser precavido, tenia que actuar con "carpa" para que este hombre no se diera cuenta que me estaba llevando, accidentalmente, su camión por error.
Luego de manejar por varias horas y alejarme de esa zona, estaba bastante cansado de manejar, así que lo puse a manejar al mono
cierro los ojos por unos segundos, cuando repentinamente siento una frenada y un fuerte golpe.
Una señora muy distraida había chocado mi camión!!
Con los ojos desorbitados y la mujer hecha concha en el piso, logre recordar lo que me enseño una vieja torta que conocí hacia muchos años, me había dicho: "si alguna vez vas durmiendo en un camión mientras tu mono esta al volante y una vieja choca tu camión, no desesperes solo saca un huevo y fríelo, la comida cura todo"
Así que es lo que hice, intente despertar a la vieja zamarreándola para que me vaya al super a comprar huevos, pero no tuve éxito. Creo que estaba durmiendo o se estaba haciendo la dormida para no pagarme los daños que le había hecho al camión o tan solo para no pagar los huevos.
Luego de insistir por varias horas, desistí de la idea, además ya me estaba empezando a dar un poco de asco toda esa sangre, así que mande al mono a comprarme los huevos y yo mientras tanto abrí la parte de atrás del camión para ver si tenia alguna hornalla donde freírlos.
Para mi sorpresa no había hornalla, solamente un hombre, atado de pies y manos, y en su frente unas letras.
Eran siglas, "ATM" decía. en ese mismo instante mi felicidad y gratitud fue inexplicable.
Sin dudarlo un momento, subí a la mujer a la parte de atrás del camión, encendí el vehículo y sin esperanzas de que vuelva el mono emprendí camino.
Debía encontrar una jaula lo antes posible.
Por suerte recordé las épocas en que solía trabajar en el zoológico, y sabia que ahí podría encontrar una.
Llegue allí, tome la jaula, me viole un león para recordar viejas épocas y retome camino hacia esa transitada calle de palermo.
cuando llegue, desate al hombre, quien estaba inconsciente, aun con las siglas en su frente, ate a la vieja y los metí a ambos en la jaula en la posición del misionero.Deje el camión allí y marche.
El mono había salvado mi pellejo. Las siglas significaban "Atentamente Tao Muí".
La vieja que atropello mi camión era la mujer a la que yo le debía el dinero. Mi mama. y el hombre atado atrás era el que la aguantaba a diario. Mi papa. Nadie sospecharía de mi.
Mis problemas habían terminado, y aparentemente los del mono también. ahora solo se drogaba por placer. Y yo pude al fin dejar de mirar piñón fijo!
domingo, 12 de agosto de 2012
Amor Tirano
martes, 7 de agosto de 2012
Tarde o Temprano...
viernes, 3 de agosto de 2012
Entierro
domingo, 29 de julio de 2012
CARTA DE R.DAWKINS A SU QUERIDA HIJA JULIET
Ahora que has cumplido 10 años, quiero escribirte acerca de una cosa que para mí es muy importante. ¿Alguna vez te has preguntado cómo sabemos las cosas que sabemos? ¿Cómo sabemos, por ejemplo, que las estrellas que parecen pequeños alfilerazos en el cielo, son en realidad gigantescas bolas de fuego como el Sol, pero que están muy lejanas? ¿Y cómo sabemos que la Tierra es una bola más pequeña, que gira alrededor de esas estrellas, el Sol?
La respuesta a esas preguntas es “por la evidencia”. A veces, “evidencia” significa literalmente ver (u oír, palpar, oler) que una cosa es cierta. Los astronautas se han alejado de la Tierra lo suficiente como para ver con sus propios ojos que es redonda. Otras veces, nuestros ojos necesitan ayuda. El “lucero del alba” parece un brillante centelleo en el cielo, pero con un telescopio podemos ver que se trata de una hermosa esfera: el planeta que llamamos Venus. Lo que aprendemos viéndolo directamente (u oyéndolo, palpándolo, etc.) se llama “observación”.
Muchas veces, la evidencia no sólo es pura observación, pero siempre se basa en la observación. Cuando se ha cometido un asesinato, es corriente que nadie lo haya observado (excepto el asesino y la persona asesinada). Pero los investigadores pueden reunir otras muchas observaciones, que en un conjunto señalen a un sospechoso concreto. Si las huellas dactilares de una persona coinciden con las encontradas en el puñal, eso demuestra que dicha persona lo tocó. No demuestra que cometiera el asesinato, pero además pueda ayudar a demostrarlo si existen otras muchas evidencias que apunten a la misma persona. A veces, un detective se pone a pensar en un montón de observaciones y de repente se da cuenta que todas encajan en su sitio y cobran sentido si suponemos que fue Fulano el que cometió el asesinato.
Los científicos -especialistas en descubrir lo que es cierto en el mundo y el Universo- trabajan muchas veces como detectives. Hacen una suposición (ellos la llaman hipótesis) de lo que podría ser cierto. Y a continuación se dicen: si esto fuera verdaderamente así, deberíamos observar tal y cual cosa. A esto se llama predicción. Por ejemplo si el mundo fuera verdaderamente redondo, podríamos predecir que un viajero que avance siempre en la misma dirección acabará por llegar a mismo punto del que partió. Cuando el médico dice que tienes sarampión, no es que te haya mirado y haya visto el sarampión. Su primera mirada le proporciona una hipótesis: podrías tener sarampión. Entonces, va y se dice: “Si de verdad tiene el sarampión, debería ver….” y empieza a repasar toda su lista de predicciones, comprobándolas con los ojos (¿tienes manchas?), con las manos (¿tienes caliente la frente?) y con los oídos (¿te suena el pecho como suena cuando se tiene el sarampión?). Sólo entonces se decide a declarar “Diagnóstico que la niña tiene sarampión”. A veces, los médicos necesitan realizar otras pruebas, como análisis de sangre o rayos x, para complementar las observaciones hechas con sus ojos, manos y oídos.
La manera en que los científicos utilizan la evidencia para aprender cosas del mundo es tan ingeniosa y complicada que no te la puedo explicar en una carta tan breve. Pero dejemos por ahora la evidencia, que es una buena razón para creer algo, porque quiero advertirte en contra de tres malas razones para creer cualquier cosa: se llaman “tradición”, “autoridad” y “revelación”.
Empecemos por la tradición. Hace unos meses estuve en televisión, charlando con unos 50 niños. Estos niños invitados habían sido educados en diferentes religiones: había cristianos, judíos, musulmanes, hindúes, sijs… El presentador iba con el micrófono de niño en niño, preguntándoles lo que creían. Lo que los niños decían demuestra exactamente lo que yo entiendo por “tradición”. Sus creencias no tenían nada que ver con la evidencia. Se limitaban a repetir las creencias de sus padres y de sus abuelos, que tampoco estaban basadas en ninguna evidencia. Decían cosas como “los hindúes creemos tal y cual cosa”, “los musulmanes creemos esto y lo otro”, “los cristianos creemos otra cosa diferente”.
Como es lógico, dado que cada uno creía cosas diferentes, era imposible que todos tuvieran razón. Por lo visto, al hombre del micrófono esto le parecía muy bien, y ni siquiera los animó a discutir sus diferencias. Pero no es esto lo que me interesa de momento. Lo que quiero es preguntar de dónde habían salido sus creencias. Habían salido de la tradición. La tradición es la transmisión de creencias de los abuelos a los padres, de los padres a los hijos, y así sucesivamente. O mediante libros que se siguen leyendo durante siglos. Muchas veces, las creencias tradicionales se originan casi de la nada: es posible que alguien las inventara en algún momento, como tuvo que ocurrir con las ideas de Thor y Zeus; pero cuando se han transmitido durante unos cuantos siglos, el hecho mismo de que sean muy antiguas las convierte en especiales. La gente cree ciertas cosas sólo porque mucha gente ha creído lo mismo durante siglos. Eso es la tradición.
El problema con la tradición es que, por muy antigua que sea una historia, es igual de cierta o de falsa que cuando se inventó la idea original. Si te inventas una historia que no es verdad, no se hará más verdadera porque se trasmita durante siglos, por muchos siglos que sean.
En Inglaterra, gran parte de la población ha sido bautizada en la Iglesia Anglicana, que no es más que una de las muchas ramas de la religión cristiana. Existen otras ramas, como la ortodoxa rusa, la católica romana y la metodista. Cada una cree cosas diferentes. La religión judía y la musulmana son un poco más diferentes, y también existen varias clases distintas de judíos y de musulmanes. La gente que cree una cosa está dispuesta a hacer la guerra contra los que creen cosas ligeramente distintas, de manera que se podrá pensar que tienen muy buenas razones -evidencias- para creer lo que creen. Pero lo cierto es que sus diferentes creencias se deben únicamente a diferentes tradiciones.
Vamos a hablar de una tradición concreta. Los católicos creen que María, la madre de Jesús, era tan especial que no murió, sino que fue elevada al cielo con su cuerpo físico. Otras tradiciones cristianas discrepan, diciendo que María murió como cualquier otra persona. Estas otras religiones no hablan mucho de María, ni la llaman “Reina del cielo”, como hacen los católicos. La tradición que afirma que el cuerpo de María fue elevado al cielo no es muy antigua. La Biblia no dice nada de cómo o cuándo murió; de hecho, a la pobre mujer apenas se la menciona en la Biblia. Lo de que su cuerpo fue elevado a los cielos no se inventó hasta unos seis siglos después de Cristo. Al principio, no era más que un cuento inventado, como Blancanieves o cualquier otro. Pero con el paso de los siglos se fue convirtiendo en una tradición y la gente empezó a tomársela en serio, sólo porque la historia se había ido transmitiendo a lo largo de muchas generaciones. Cuanto más antigua es una tradición, más en serio se la toma la gente. Y por fin, en tiempos muy recientes, se declaró que era una creencia oficial de la Iglesia Católica: esto ocurrió en 1950, cuando yo tenía la edad que tienes tú ahora. Pero la historia no era más verídica en 1950 que cuando se inventó por primera vez, seiscientos años después de la muerte de María.
Al final de esta carta volveré a hablar de la tradición, para considerarla de una manera diferente. Pero antes tengo que hablarte de la otras dos malas razones para creer una cosa: la autoridad y la revelación.
La autoridad, como razón para creer algo, significa que hay que creer en ello porque alguien importante te dice que lo creas. En la Iglesia Católica, por ejemplo, la persona más importante es el Papa, y la gente cree que tiene que tener razón sólo porque es el Papa. En una de las ramas de la religión musulmana, las personas más importantes son unos ancianos barbudos llamados ayatolás. En nuestro país hay muchos musulmanes dispuestos a cometer asesinatos sólo porque los ayatolás de un país lejano les dicen que lo hagan.
Cuando te decía que en 1950 se dijo por fin a los católicos que tenían que creer en la asunción a los cielos del cuerpo de María, lo que quería decir es que en 1950 el Papa les dijo que tenían que creer en ello. Con eso bastaba. ¡El Papa decía que era verdad, luego tenía que ser verdad! Ahora bien, lo más probable es que, de todo lo que dijo el Papa a lo largo de su vida, algunas cosas fueron ciertas y otras no fueron ciertas. No existe ninguna razón válida para creer que todo lo que diga sólo porque es el Papa, del mismo modo que no tienes por qué creer todo lo que te diga cualquier otra persona. El Papa actual ha ordenado a sus seguidores que no limiten el número de sus hijos. Si la gente sigue su autoridad tan ciegamente como a él le gustaría, el resultado sería terrible: hambre, enfermedades y guerras provocadas por la sobrepoblación.
Por supuesto, también en la ciencia ocurre a veces que no hemos visto personalmente la evidencia, y tenemos que aceptar la palabra de alguien. Por ejemplo, yo no he visto con mis propios ojos ninguna prueba de que la luz avance a una velocidad de 300.000 kilómetros por segundo, sin embargo, creo en los libros que me dicen la velocidad de la luz. Esto podría parecer “autoridad” pero en realidad es mucho mejor que la autoridad, porque la gente que escribió esos libros sí que había observado la evidencia, y cualquiera puede comprobar dicha evidencia siempre que lo desee. Esto resulta muy reconfortante. Pero ni siquiera los sacerdotes se atreven a decir que exista alguna evidencia de su historia acerca de la subida a los cielos del cuerpo de María.
La tercera mala razón para creer en las cosas se llama “revelación”. Si en 1950 le hubieras podido preguntar al Papa cómo sabía que el cuerpo de María había ascendido al cielo, lo más probable es que te hubiera respondido que “se le había revelado”. Lo que hizo fue encerrarse en su habitación y rezar pidiendo orientación. Había pensado y pensado, siempre solo, y cada vez se sentía más convencido. Cuando las personas religiosas tienen la sensación interior de que una cosa es cierta, aunque no exista ninguna evidencia de que sea así, llaman a esa sensación “revelación”. No sólo los Papas aseguran tener revelaciones. Las tienen montones de personas de todas las religiones, y es una de las principales razones por las que creen las cosas que creen. Pero ¿es una buena razón?
Supón que te digo que tu perro ha muerto. Te pondrías muy triste y probablemente me preguntarías: “¿Estás seguro? ¿Cómo lo sabes? ¿Cómo ha sucedido?” y supón que yo te respondo: “En realidad no sé que Pepe ha muerto. No tengo ninguna evidencia. Pero siento en mi interior la curiosa sensación de que ha muerto”. Te enfadarías conmigo por haberte asustado, porque sabes que una “sensación” interior no es razón suficiente para creer que un lebrel ha muerto. Hacen falta pruebas. Todos tenemos sensaciones interiores de vez en cuando, y a veces resulta que son acertadas y otras veces no lo son. Está claro que dos personas distintas pueden tener sensaciones contrarias, de modo que ¿cómo vamos a decidir cuál de las dos acierta? La única manera de asegurarse que un perro está muerto es verlo muerto, oír que su corazón se ha parado, o que nos lo cuente alguien que haya visto u oído alguna evidencia real de que ha muerto.
A veces, la gente dice que hay que creer en las sensaciones internas, porque si no, nunca podrás confiar en cosas como “mi mujer me ama”. Pero éste es un mal argumento. Puedes encontrar abundantes pruebas de que alguien te ama. Si estás con alguien que te quiere, durante todo el día estarás viendo y oyendo pequeños fragmentos de evidencia, que se van sumando. No se trata de una pura sensación interior, como la que los sacerdotes llaman revelación. Hay datos exteriores que confirman la sensación interior: miradas en los ojos, entonaciones cariñosas en la voz, pequeños favores y amabilidades; todo eso es autentica evidencia.
A veces, una persona siente una fuerte sensación interior de que alguien la ama sin basarse en ninguna evidencia, y en estos casos lo más probable es que esté completamente equivocada. Existen personas con una firme convicción interior de que una famosa estrella de cine las ama, aunque en realidad la estrella siquiera las conoce. Esta clase de personas tienen la mente enferma. Las sensaciones interiores tienen que estar respaldadas por evidencias; si no, no podemos fiarnos de ellas.
Las intuiciones resultan muy útiles en la ciencia, pero sólo para darte ideas que luego hay que poner a prueba buscando evidencias. Un científico puede tener una “corazonada” acerca de una idea que, de momento, sólo “le parece” acertada. En sí misma, ésta no es una buena razón para creer nada; pero sí que puede razón suficiente para dedicar algún tiempo a realizar un experimento concreto o buscar pruebas de una manera concreta. Los científicos utilizan constantemente sus sensaciones interiores para sacar ideas; pero estas ideas no valen nada si no se apoyan con evidencias.
Te prometí que volveríamos a lo de la tradición, para considerarla de una manera distinta. Me gustaría intentar explicar por qué la tradición es importante para nosotros. Todos los animales están construidos (por el proceso que llamamos evolución) para sobrevivir en el lugar donde su especie vive habitualmente. Los leones están equipados para sobrevivir en las llanuras de África. Los cangrejos de río están construidos para sobrevivir en agua salada. También las personas somos animales, y estamos construidos para sobrevivir en un mundo lleno de… otras personas. La mayoría de nosotros no tienen que cazar su propia comida, como los leones y los bogavantes; se las compramos a otras personas, que a su vez se la compraron a otras. Nadamos en un “mar de gente”. Lo mismo que el pez necesita branquias para sobrevivir en el agua, la gente necesita cerebros para poder tratar con otra gente. El mar de está lleno de agua salada, pero el mar de gente está lleno de cosas difíciles de aprender. Como el idioma.
Tú hablas inglés, pero tu amiga Ann-Kathrin habla alemán. Cada una de vosotras habla el idioma que le permite hablar en su “mar de gente”. El idioma se transmite por tradición. No existe otra manera. En Inglaterra, tu perro Pepe es a dog. En Alemania, es ein Hund. Ninguna de estas palabras es más correcta o más verdadera que la otra. Las dos se transmiten de manera muy simple. Para poder nadar bien en su propio “mar de gente”, los niños tienen que aprender el idioma de su país y otras muchas cosas acerca de su pueblo; y esto significa que tienen que absorber, como si fuera papel secante, una enorme cantidad de información tradicional (Recuerda que “información tradicional” significa, simplemente, cosas que se transmiten de abuelos a padres y de padres a hijos.) El cerebro del niño tiene que absorber toda esta información tradicional, y no se puede esperar que el niño seleccione la información buena y útil, como las palabras del idioma, descartando la información falsa o estúpida, como creer en brujas, en diablos y en vírgenes inmortales.
Es una pena, pero no se puede evitar que las cosas sean así. Como los niños tienen que absorber tanta información tradicional, es probable que tiendan a creer todo lo que los adultos les dicen, sea cierto o falso, tengan razón o no. Muchas cosas que los adultos les dicen son ciertas y se basan en evidencias, o, por lo menos en el sentido común. Pero si les dicen algo que sea falso, estúpido o incluso maligno, ¿cómo pueden evitar que el niño se lo crea también? ¿Y que harán esos niños cuando lleguen a adultos? Pues seguro que contárselo a los niños de la siguiente generación. Y así, en cuanto la gente ha empezado a creerse una cosa -aunque sea completamente falsa y nunca existan razones para creérsela-, se puede seguir creyendo para siempre.
¿Podría ser esto lo que ha ocurrido con las religiones? Creer en uno o varios dioses, en el cielo, en la inmortalidad de María, en que Jesús no tuvo un padre humano, en que las oraciones son atendidas, en que el vino se transforma en sangre…, ninguna de estas creencias está respaldada por pruebas auténticas. Sin embargo, millones de personas las creen, posiblemente porque se les dijo que las creyeran cuando todavía eran suficientemente pequeñas como para creerse cualquier cosa.
Otros millones de personas creen en cosas diferentes, porque se les dijo que creyesen en ellas cuando eran niños. A los niños musulmanes se les dice cosas diferentes de las que se les dicen a los niños cristianos, y ambos grupos crecen absolutamente convencidos de que ellos tienen razón y los otros se equivocan. Incluso entre los cristianos, los católicos creen cosas diferentes de las que creen los anglicanos, los episcopalianos, los shakers, los cuáqueros, los mormones o los holly rollers, y todos están absolutamente convencidos de que ellos tienen razón y los otros están equivocados. Creen cosas diferentes exactamente por las mismas razones por las que tú hablas inglés y tu amiga Ann-Kathrin habla alemán. Cada una de los dos idiomas es el idioma correcto en su país. Pero de las religiones no se puede decir que cada una de ellas sea la correcta en su propio país, porque cada religión afirma cosas diferentes y contradice a las demás. María no puede estar viva en la católica Irlanda del Sur y muerta en la protestante Irlanda del Norte.
¿Qué se puede hacer con todo esto? A ti no te va a resultar fácil hacer nada, porque sólo tienes 10 años. Pero podrías probar una cosa: la próxima vez que alguien te diga algo que parezca importante piensa para tus adentros: “¿Es ésta una de esas cosas que la gente suele creer basándose en evidencias? ¿O es una de esas cosas que la gente cree por la tradición, autoridad o revelación?” Y la próxima vez que alguien te diga que una cosa es verdad, prueba a preguntarle “¿Qué pruebas existen de ello?” Y si no pueden darte una respuesta, espero que te lo pienses muy bien antes de creer una sola palabra de lo que te digan.
Te quiere,
Papá.
miércoles, 25 de julio de 2012
Venganza!
lunes, 18 de junio de 2012
Miedos...
Y si nuestros caminos se cruzaron en el desierto, donde ya nadie camina derecho, donde el agua no calma tu sed, y mi fuerza alimenta el deseo.
Encuentro pensamientos que vuelan unos tras otro, sin tocarse ni sentirse, a veces parecen que pelean por llamar mi atención, yo trato de ignorarlos, pero me aprisionan y todo vuelve a empezar.
¿Como empezar si nunca termino? Aunque a veces pienso que el único final es la muerte. Muerte de la que no se puede escapar, mueren los sentimientos y los pensamientos, mueren las personas pero no sus sueños.
Hoy me siento esclava de mis palabras, y siempre dueña de mis silencios, ya no se si camino o vuelo, solo espero estar avanzando.
¿Me detengo a observar el paisaje o sigo con los ojos cerrados? El paisaje puede volverse adictivo, puede pedir que me quede, y mi obsesión por su belleza puede restringirme el paso.
A pesar de mi locura, de mis ansias y mi pasiones, podría mantener la oscuridad, si no parpadeo las lagrimas no saldrán. ¿Será eso lo que quiero?
El tiempo no se detiene, yo tampoco debería hacerlo, ¿Para que perder las esperanzas si el sol, que se pierde cada noche, siempre vuelve a su paseo?
sábado, 9 de junio de 2012
Impaciente
Impaciente. Si, siempre fui muy impaciente. Las
ansias corren por mis venas.
Cada noche, bajo la luna que se oculta y aun me mira, tus ojos logran alumbrarme.
Siento un intenso mar, con sus olas confundo tu boca con un océano, lleno de palabras que no se pueden decir, pero que igualmente inundan el ambiente.
Nos retraemos en las acciones, pero no podemos controlar los impulsos de nuestros latidos.
Pasan las horas, y aun estas aquí, tus labios se humedecen mutuamente pidiendo ayuda de otros labios, de mis labios, intento seguir ese juego pero caigo en tu trampa y muero una vez mas.
Me revive tu sonrisa y otra vez esa maldita sensación de impotencia.
Quiero te conmigo. Que lejos estas, amor mío.
Dudas, preguntas, vacíos incomprensibles. ¿Podrá ser, que por un momento, nos olvidemos y solo busquemos ser felices?
No hace mucho que se de ti, eso solía importar, me doy cuenta que jamás había encontrado algo tan especial.
Mi nombre cambias por un sentimiento, el mayor de ellos y yo idiotizada frente a ti, solo consigo perderme.
¿Que será de mi? ¿Qué será de ti?
Aun no lo sabemos, solo espero que lo descubras a mi lado. Estoy segura que es mas de lo que jamás hayas soñado.
jueves, 7 de junio de 2012
martes, 5 de junio de 2012
El pene de hule
Allí yacía el cuerpo de Augusto Fonseca, un amigo muy querido de mi padre, el ruso, que como conté la vez pasada, no conozco.
Visite ese cementerio, con mi perro, manchas y mi gato, con botas.
El tema es que al llegar a la lapida que decía augusto, note que la fecha en que falleció aun no había llegado, es decir, según su lapida, el todavía estaba vivo.
Por lo que, aunque temía que la curiosidad mate a mi gato, como dicen que hace, me propuse investigar pero por las dudas fui a llevar al gato a casa.
Una casa con puerta roja, sin rejas, con un buzón con forma de tortuga en el que el cartero dejaba mis mas intimos secretos. De allí partió mi búsqueda al ver que el extraño cartero no me trajo cartas por una semana, me dije a mi misma, y si voy a buscarlas al correo? Y lo hice.
Deje al gato, fui al correo que quedaba a 15 cuadras y media de mi casa, estuve a punto de contar los pasos, pero me canse a mitad de camino, llego al correo y me acerco a la ventanilla de una gorda, con cara de poco sexo, ojeras como si hubiera estado hace años despierta y una camisa amarilla, que te digo que si se comía una uva le reventaba todos los botones, le hablo, con mi mejor cara y le digo mi nombre, a lo que le cambio mi apellido y le dije fonseca para que? te preguntaras, por el muertito que no estaba muertito, según la lapida, y ahí me dijo "si, que quieres?" a lo que conteste que necesitaba saber si estaban llegando cartas de mi "tío" y me pidió el nombre, se lo di y me dijo que si, pero que se las estaban entregando en mano. Lo que me pareció curioso fue que no quisiera corroborar nunca mi identidad, pero como note que cogía poco, supuse que no tenia ganas de perder mucho tiempo conmigo,se iba a excitar si me veía mucho tiempo y creo que no quiso pasar por eso.
Pero bueno, con una sonrisa, me despedí, me guiño el ojo y corrí despavorida a buscar a mi gato a ver si seguía vivo.
Llego a mi casa, de puerta roja sin rejas, la atravieso y veo al gato, vivo, comiendo su comida, cat chow, sabor a frutos del mar. Siempre le compro ese porque es vegetariano.
Bueno, ya dentro de mi casa, me siento en la mesa con mi notebook, la cual me encontre, pero eso es historia para otro dia, entro a google, que justo ese día festejaba los 200 años de la invención de la bombucha de agua y busco el nombre de Augusto Fonseca y en el face el perfil de la gorda del correo, por las dudas, viste que en épocas de hambre siempre esta bueno tener una reserva.
Bueno, en google, tras mi búsqueda, me aparece un blog, en donde se escribían poemas de amor..entro al blog y leyendo un poco encuentroque había una publicación del día que lo había ido a ver al cementerio, el titulo decía "nunca estas solo, gracias por las flores!".
Mi corazón empezó a latir muy agitadamente me agarraron escalofríos y empecé a sudar...lo que no recuerdo, es el como, pero todo eso fue producido, porque estaba corriendo, no se cuando empecé a hacerlo. De repente me encontré en el medio de la calle, con mi perro y sin el gato, en la calle chubut, a media cuadra de la vía.
Cuando alcance a reaccionar me di cuenta que estaba llegando a la casa donde solía vivir esta persona y tenia en mis manos un ramo de flores, en total 11 flores, se ve que la otra que le falta a la docena se la había mandado a la gorda del correo.
Llego a la casa, con puerta verde, con rejas azules y un buzón con forma de pene y pensé, que tipo ridículo que era y me parece, que es gay, por que no todos tenemos unas rejas azules. Me acerque a la reja y toque el timbre. Se asomo una señora, quien muy dulcemente me pregunta a quien busco, le digo el nombre y me dice que el ya no vive allí, que se mudo a Perú hacia 3 años. Justo hacia 3 años, nos habían dicho que murió..todo empezaba a cerrar para mi. Pensé que había descubierto su homosexualidad, y se había ido del país, dándose por muerto para que pudiera expresarlo tranquilo. Pero la vieja me cago la teoria, cuando me dijo que el no era puto, si no que ella era una sexo-pata amante del pene y me mostró uno de hule que me obligo a usar para tener relaciones con ella. Me dijo "o te acostas conmigo o te cierro tu blog".
Por suerte tome la decisión correcta e hice lo que tenia que hacer(?).
Al final la vieja me dijo que tenia un pasaje extra con fecha abierta para ir a Perú, que si quería se iba conmigo y lo buscábamos. Aun con curiosidad,sabiendo aun que peligraba la vida de mi gato, decidí hacerle caso y me volví a mi casa a preparar las valijas. Cuando estoy llegando, infortunadamente, me crucé con la gorda del correo que venia muy feliz con la rosa que, aparentemente, le regale. Me volvió a guiñar el ojo, y me dijo que me había mentido. Fue ahí que me detuve y le pregunte cuando y porqué, a lo que me dijo que a Augusto no le llegaban cartas por que ella las retenía en su poder que si las quería la acompañase a la casa que me las mostraba.
Con un tercer guiño de ojo, preferí quedarme con la duda de si seguía vivo, salvandole la vida a mi gato, y por el miedo de que viole la gorda, me fui a
vivir a Perú con la vieja, con la cual ahora vivimos hermosos momentos con su pene de hule y su buzón.
martes, 1 de mayo de 2012
El origen de mi apodo
Después de años de investigación, me encontré con un científico que me dijo que me podía ayudar pero me pidió a cambio que fuera chivo expiatorio para algunas pruebas de drogas que estaba haciendo.
Nunca supe su nombre, solo me dijo que le diga pepe, pero hablaba en ingles, así que supongo que no se llamaba así.
El hecho es que accedí, con la desesperación de encontrar a mi familia rusa.
Hice las pruebas que me pidió. Iba todo genial. Solo me habían salidos dos tumores pero por suerte solamente uno era maligno, así que seguimos con los experimentos.
Un día, sin previo aviso, me dio una foto y me dijo: "esta es tu madre verdadera"
búscala y me dio una guía T.
A lo que le dije: “buen, me pones las drogas que quedaron para llevar porfa
para el camino vithe!”
“yo te mando what's app y te digo como va todo”, continúe.
Pepe me contesto: "no mija, ya terminamos, no hay mas pruebas por hacer"
"tu ultima prueba es encontrar a esa mujer". (Todo en ingles).
Y ahí me puse re loquita, le rompí todo el laboratorio (que tenia ubicado en once)
a lo que el viejo se calentó y llamo a la cana. Me tuvieron detenida 2 años hasta que me dieron la condicional.
Salí de la cárcel, me tome un taxi patente kdj343. Y le dije al tachero, que se llamaba Raúl, que me lleve al aeropuerto.
Cuando llego, me quiero bajar del taxi y el tachero me dice" son 100 pe piba".
A lo que le digo: “tenes cambio” (?)
Y me dice “no, no acepto patacones”
“buen, bancame que voy a robarle a la vieja esa, total ya estuve 2 años en cana, que me hacen unos días mas”, agregue.
Voy la encaro a la vieja. Y le dije que se quede quieta, que iba a estar todo bien.
En eso la vieja se da vuelta, me abraza y me dice “siiii!! Ahora sii... nietitaaa” (en ruso)
“vos sos rusaa jess la del feisbu noo?” (me dice la vieja)
y le dije, y usted doña como sabe??
Me dice por que salto la sugerencia del feibu y te reconocí.
Vamos a verlo al pepe que me debe unas cositas y nos volvemos para Rusia…
Mi tierna abuelita se encerró 2 horas y media con pepe en el laboratorio, yo creo que le estaba pasando la receta del budín de pan.